Disimular

Hay que ver como está el tiempo... tras unos días lluviosos hoy, y la noche más fría del invierno en alicante, esta mañana, cuando he bajado a la capital, me he encontrado un sol reluciente que doraba el mar invitando a tumbarse en las suaves arenas de la playa e incluso sumergirse en las azules aguas mediterráneas. Y es que hasta cuando volvía a casa he tenido que poner el aire frio en el coche porque me abrasaba dentro de calor con la ropa de invierno. El tiempo. Siempre tan cambiante. Curioso. Como mi vida. Hay días que siento la lluvia sobre mí, empapándome, cubriéndome, mojándome. Hay veces que es agradable, otras fría y me hace temblar, otras molesta... O el sol, hay días brillantes, otros cegadores y molestos para la vista. O el frío, hay días que mejor no salir de casa. O el calor, que invita a bajar a la playa, pero otros días solo quieres aire aconcionado y agua fresca, o mejor, limonada...

O es un día en el que he visto a mis antiguos compañeros y antiguos usuarios. Cuando volvía a casa pensaba que la droga hace mucho daño y destroza muchas vidas y que hay gente que realmente nunca llegara a salir, por mucho empeño que le ponga. Acaba autoengañándose. Y no se si es mejor fomentar ese autoengaño y conseguir pequeñas satisfacciones, pequeñas felicidades para la persona (pequeños pasos que podrían conducir a una mejora notable, pero nunca a una mejora total) o si, por el contrario, es mejor soltar a bocajarro todo lo sabes que ocurrirá y que la persona apechugue con lo suyo... Afortunadamente hoy es un día soleado de los que no trabajo y no voy a vivir esa realidad...