trabajando...

Casi las 2 de la mañana y trabajando... Y mañana por la mañana tengo que ir al juzgado a que me vea el médico forense por aquel incidente que tuve con aquel menor por aquellas fechas de abril... Y a las 3 de la tarde de nuevo a trabajar, así que lo de dormir suena a quimera. Pero bueno, el martes lo tendré libre... Últimamente apenas dispongo de tiempo. Estoy aprovechando cada instante para estudiar porque quiero acabar de una vez el postgrado (esta semana saqué un 7 y medio y esta que entra acabaré un examen, el último por fín, que ya tengo a mitad). Por otro lado me he matriculado para obtener el título de Nivel Mitjà (medio) en el idioma de valenciano que tan bien me vendrá a la hora de opositar aquí en la Comunidad Valenciana, porque me he apuntado a unas oposiciones de auxiliar de biblioteca y porque el verano que viene me gustaría opositar a profesor de secundaria especialidad de FOL. Mientras sigo con el proyecto de empleo por la mañana y con el trabajo de educador por la tarde...

Lo peor es que mientras mi vida se agita de éste modo mi abuela se va apagando tras cuatro semanas en la residencia y tengo la sensación de no haber disfrutado mucho la vida con ella, de haberla compartido. No se si es culpa mía, de ella o de mis padres... pero es lo que hay. Y es mi última abuela, porque por desgracia ya he perdido a todos los demás... Supongo que no debería qejarme ya que tengo 31 y he disfrutado de ellos hasta hace muy poco, pero eso tampoco es consuelo...

Y veo que la vida sigue, y me cruzo mientras iba el sábado camino de la boda de un amigo, con mi primo que iba andando por la calle con su hija pequeña, un encanto ella. Y escucho a mi propia sobrina gritar por tfno con los 3 añitos que cumplirá el próximo octubre: QUE NO TENGO NOVIOOOOOOO (tras contar el día anterior que tiene un novio que se llama Jorge y que es muy guapo pero muy simple, ahí queda eso)... Y de repente me descubro con 31. Y cada día veo crecer a los peques de mi centro de menores... Está claro: la vida sigue...

... así que la vida hay que disfrutarla y beberla en cada uno de los pequeños detalles que nos rodean. Como el cd que mañana publicarán Bunbury y Vegas y que hace ya tiempo compré por internet y que recogeré el martes en la Fnac... Como cada vez que ahora monto en mi coche nuevecito y disfruto cada kilómetro... Como cada día que duermo en mi piso... Como cada beso... Como cada instante de tranquilidad o cada día que puedo escaparme al gimnasio... Como cada partido que puedo ver (que cada vez son menos)...

Solo que me gustaría tener un poco más de tiempo para disfrutarla mejor...

Buenas noches...