resumen

Bufffffffffff, cuanto tiempo...

Y el caso es que he pensado escribir por aqui antes, pero entre el trabajo (por cierto, acabo mñna), el puente, que en el piso nuevo no tengo internet y un poco, para que negarlo, de pereza, se han pasado los dias volando...

Y han sido dias extraños, nuevos, interesantes, y en algunos casos muy muy tristes...

Lo primero fue que la semana pasada, en el trabajo, me tocó justificar el proyecto del último año, es decir, expedientes y memoria. Una odisea y un infierno. Finalmente, tras dedicarle horas personales, se cumplio el objetivo. En medio conseguí sacar un hueco para poder ver al Brujo en una representación teatral prácticamente dirigida desde la improvisación. El Brujo es, junto a Josep Maria Flotats, mi actor de teatro favorito. En dos semanas vere a Flotats. Buena temporada de teatro. El caso es que acabé el viernes la maldita justificacion que pone fin a mi relación de trabajo con esta fundación y con el plan que he desarrollado. Una lástima porque realmente he estado bien, pero bueno, como desde aquí he presentado nuevos proyectos no me sorprendería que me volvieran a llamar pronto. Y mientras tanto me dedicaré a descansar, estudiar, preparar las oposiciones de una vez (que ya me vale) y vivir, que no es poco...

El caso es que llegó el viernes y me lo tomé con mucha filosofía. Comí a las 5 por trabajo, pero luego hubo siesta y gimnasio, cena en el piso y FRIENDS. Buen dia.

El sábado tocó playa (aún con el trabajo: el otro proyecto que he llevado). Impresionante el buen tiempo que hacia. Sobre la 1, en plan kamikazes, decidimos darnos en el que parece ser el último baño de la temporada. El agua estaba fresquita, pero hacia un calor impresionante, de modo que el contraste era genial, una sensación estupenda. Fue realmente divertido bañarme en el mar a finales de octubre, cosas del cambio climático. El resto del día fue normal: fuimos con mis padres a ver el sofa a la tienda, vimos televisores para el futuro, una carrera para ver el madrid, cena en la mejor compañía y una escapada de fiesta.

El domingo sucedió de modo normal, desayuno de domingo, mentirijilla piadosa para no comer en casa de los papis (había cocido!!!) y una llamada para ver La Novia Cadáver (impresionante!!!, Burton cada día mejor). De ahí a una cena para 4 en la que estábamos invitados de antemano en un muy buen restaurante, cosas del gimnasio al que voy. Gran cena y mejor compañía.

Y el lunes me lo tomé de puente. Más piso para disfrutar del seulo de madera recién estrenado (ahora dormir en un colchón hinchable sobre el suelo tiene hasta glamour, jeje) y, ese día si, a comer en casa de los papis. Has ahí todo bien. La tarde la tenía programada para ir al gim, pero aquí llegó la noticia triste y absurda del finde: el sábado anterior, cuando estuve de fiesta, coincidí con gente del equipo de trabajo del gimnasio al que voy, compañeros a su vez del amigo con el que iba. Pues bien, uno de ellos, en una de esas tonterias absurdas que suceden, parece ser que discutió con su novia y decidió irse (yo me enteré más tarde). Perdió la vida en la carretera. :Ó( . No entiendo la vida. Sinceramente. No entiendo nada. Y no me enteré hasta el lunes cuando el sábado, minutos antes, acababa de verlo. Me parece absurdo e injusto. Y a partir de ahí todo muy triste.

El resto podría resumirlo en alguna escapada a ver muebles (para sacar ideas), seleccionar muebles de baño, ver pelis, hacer vida en el piso... pero no me quito de la cabeza que la vida sea a veces tan injusta.

Y ayer, al volver al trabajo, me dí cuenta que la semana que viene me corresponden vacaciones y que el día 14 acabo, de modo que mñna es mi último día de trabajo y aún me queda un proyecto por presentar. Evidentemente no me da tiempo. Solo me queda dejarlo avanzado, preparado, encaminado, y confiar en que lo acaben y presenten...

Es justo el momento idóneo para que me toque la lotería. Esta noche, sin que sirva de precedente, haré la primitiva.