Vidas cruzadas

Bueno, pues ha pasado una semana justa de la operación y en cuestión de minutos volveré al dentista, esta vez para que me quite los puntos... La hinchazón ha bajado, el lado izquierdo de la cara lo tengo amarillo betadine del morado que se me hizo y todavía me duele, pero ya estoy mejor... Lo peor ha pasado, espero. Ahora me quitarán los puntos y en breve acudiré de nuevo por si me pueden realizar un estudio general a ver si pueden ponerme un implante en la última muela del lado izquierdo superior, la que me han quitado... Y el resto será historia.

La semana por otra parte no ha dado mucho más de sí. O sí. Para empezar el trabajo sigue más o menos igual, hay chavales nuevos y alguna de las anecdotas suaves podría ser la del chaval de 15 años (al que su madre, literalmente, no puede tener en casa porque el chico la agrede) con una deficiencia del 50%, que se escapa el fin de semana, contrata los servicios de una prostituta, luego a punta de navaja le roba (por supuesto la prostituta apareció por el centro reclamando su dinero y sus servicios y se lió, jeje, aunque yo no estaba allí en ese momento) y encima no entiende que se le sancione... Con este chico hay que tener cuidado. Ayer sin ir más lejos pensé que llegaría a agredirme, pero claro, yo también soy muy chulo y rara vez levanto la voz y eso, he descubierto, los intimida. Eso y mirarlos a los ojos mientras les hablas. O les plantas cara, que a veces es lo mismo. Difícil el trabajo de un educador en estos casos. El caso es que a partir de ese instante este chico parece mi mejor amigo, respeta mis decisiones, ayuda, colabora y ya veremos cuanto tiempo le dura, jeje. Por lo demás en el trabajo bien, poco a poco porque es duro.

Por otro lado he decidio que voy a escribir un libro. Ya. Se que es el momento. Así, sin más. Ya veré de donde saco el tiempo y la historia. Pero es lo que toca. Se cual será el comienzo... algo es algo.

El piso sigue viento en popa pero aún no hemos decidido lo del pintor. Tras varios presupuestos todo es una pasta y da miedo tirarse a la piscina. Pero habrá que hacerlo.

Sigo mi relación íntima con mi IPOD, cada día nos entendemos mejor... De hecho en el dentista el martes pasado me vino genial para aguantar la hora y media de cirugía. Gracias Sr. Dentista por dejármela.

Y el domingo hicimos escapada a la playa. Y por supuesto nada más llegar se nubló. Aún así, y a pesar de la humedad de la brisa marina se estaba genial. No había mucho: ni gente, ni ruido, ni contaminación. Y aproveché para acabar el libro de Chuck Klosterman "Pégate un tiro para sobrevivir". Me ha parecido bueno. Muy bueno incluso. Interesante. O como contar algo sin contar nada.O como no contar nada contando algo. Qué buenos son los Radiohead...

Hablando de música: me gusta el "Ajuste de Cuentas" de Quique González. Y escucharlo comiendo galletas Choclait Chips. Y saber que este sábado subiré a Madrid en vista relampago y veré a la niña con voz robótica más rica del mundo...

Hablando de robots ¿alguien ha escuchado alguna vez un audiolibro? He escuchado estos días uno de mis libos favoritos, "Sin noticias de Gurb", en audiolibro y la voz metálica que los narra, desapasionada, extranjera, neutra, ha sido divertidísima, a pesar que desde el principio no me gustó nada. Contradictorio. Lo se.

Tras mi periplo por el lado salvaje del dolor (de muelas) y su extirpación puedo gritarlo alto: HE VUELTO. Y esta vez para quedarme.

Quique Gonzalez e Ivan Ferreiro: Vidas Cruzadas